PAN, TRABAJO, TECHO Y DIGNIDAD....

  Ayer, cientos de miles de ciudadanos se manifestaron por las calles de Madrid, una movilización de nueve columnas procedentes de distintas CCAA, para pedir con su lema " PAN, TRABAJO, TECHO Y DIGNIDAD".., un lema que no es manido y figura en la Constitución como otros preceptos olvidados por nuestros gobernantes, los únicos que se permiten su incumplimiento, con argumentos fuera de lugar y propios de los mejores alumnos de Chéjov, un teatro escenificado en cada pronunciamiento, ya sea en Sede Parlamentaria o en las cadenas de televisión y, por supuesto, judicial..

  A nadie le resulta indiferente esta movilización, ni dentro ni fuera de nuestro País, clama y es de dificil digestión..; los ciudadanos están provisto de un estómago bañado de "almax" y una paciencia infinita, gastada su piel, no es suficiente por quiénes nos administran..; un recorte hoy, otro mañana, una villanía hoy y una sonrisa con luz y caquígrafos para poner un color distinto a las realidades.
  Esta marcha de por la dignidiad, ha tratado de éso, de la dignidiad perdida por el gobierno, para recordarles que esta sociedad está compuesta por ciudadanos que mantienen a familias, empresarios que a su vez son responsables, de jóvenes que han perdido su futuro dentro de nuestro País, de una Sanidad pública, gratuita y universal inexistentes, vendida a los amiguetes, de una cultura enterrada y reservada al poder económico y de una gran alfombra luciente y privilegiada para quiénes,como patriotas de hojalata, se han llevado el dinero a paraísos, tendiéndoles una mano al 10%, mientras tanto, por parte de la AEAT se persigue a Pymes y a pensionistas a los cuáles, además de permitir que la banca corrupta les robe, se les exija tener conocimientos económicos y de inversión, de ahí, su error por no vigilar a quiénes se siponía velaban por su dinero.

  Un País al revés, donde se encuentran bien asentados los poderosos y donde la práctuca contumaz es el común denominador de su comportamiento.

  Hoy, tal vez, empiecen a cambiar las cosas, Andaucía se pronuncia y estoy convencido que algunos están temblando por ser éste el comienzo de un nuevo tiempo para todos aquellos ciudadanos que han visto como se les ha pisoteado y fulminado sí, fulminado, ya que algunos ya no lo pueden contar, como así ha ocurrido hoy en Navarra con el suicidio de un desahuciado, una mueca más para las conciencias de banqueros, políticos y jueces que no son capaces de frenr esta indecente practica hipotecaria.

 Veremos..........

  Lon González.