Entramos en el juego de quien es quien dentro de cada organización política; unos piensan, escriben.., los candidatos se encargan de comunicar el pensamiento y la literatura previamente diseñados en el despacho de un peso pesado en compañía de otros que tienen peso y suelen estar en la trastienda; son los que no dan la cara pero deciden mucho o todo en los partidos.
Ahora tenemos un escenario propio de unos y de otros, un escenario que era bien distinto antes del 20D; abrazos y consignas de campaña, besos y expresiones cordiales ante los medios y después de la carretera y los platós, puñales afilados.
Si eliminamos las técnicas audiovisuales y los medios de transporte, nada sería distinto de la primera democracia nacida en Roma; aquí los puñales no se ven y no se cargan a un Emperador cada vez que se mueven los intereses, esto es otra cosa bien distinta; ahora se denomina: Donde dije Diego digo Diego, no pasa nada porque a fin de cuentas una vez conseguido el voto ( Santo Grial ), ya pueden cambiar el orden alfabético o cronológico, incluso clasificar en una sola forma que por supuesto es entendible para los creadores de dualidad y de la verborrea política, con ello, olvidando respeto que le deben a los ciudadanos y el agradecimiento por haberles regalado un escaño durante cuatro años, bien pagado y mejor servido.
El lío organizado es de los buenos, de los que deja la intención y las voluntades de forma transparente; ahora se trata de gobernar, de hacerlo con dignidad y procurar para los ciudadanos en el mejor estado del bienestar, pero que ocurre..?
Ocurre que es una disposición bastante falsa o llena de bastante falsedad; unos hablan de Altura de miras indicando el camino a otros, precisamente por quiénes durante y después de la campaña manifestaba con rotundidad que no llegaría a pactos con unos y con otros, esto, quizás porque más de uno se veía directamente en el sillón de la casita de La Moncloa; ocurre que se desvelan las luchas intestinas en el seno de partidos sin llegar a cuestionarse el RIDÍCULO espantoso que se está realizando y, como no podía ser de otra manera, me estoy refiriendo al Psoe; una campaña para ensalzar a Sánchez y un empeño posterior para hundirlo, esto, ahora que los votos ya están en el bolsillo y los escaños también. Esta cruzada contra Sánchez ( que no es mi devoción ) dirigida por los barones de trastienda, incluso el mutado Socialdemócrata, ahora neoliberal Sr. González, y como cabeza visible Susana Díaz, tratan de apartarlo de las facultades y poder de decisión que El Secretario General tiene atribuidas; el argumento es No romper España y que ése tipo de decisiones se toman en un comité Federal en breve. Esto nos lleva al juego del silogismos o metáforas continuadas en un sentido recto del discurso que otros quieren escribir en cada momento.
Pero no sólo el Psoe está haciendo el ridículo debido a sus discursos iniciales y posteriores a la campaña, Podemos cambió después del primer discurso de Iglesias, ahora es otro, con ello demostró que en el seno de su partido deciden cuatro y que la democracia interna brilla por su ausencia. Saben que tienen una sartén grande y que pueden controlar las situaciones y esto les está llevando a moverse con una prepotencia bastante descarada, saben también que Ciudadanos está haciendo su juego; Rivera es otro que cambió su discurso para decir ahora que sería conveniente un acuerdo de tres con tal de evitar esa fractura de España, todos AMAN a España y también a Catalunya y también al primo de Albacete si es que éste primo les da la Moncloa.
¿ Se estará produciendo una abducción simultánea de unos y otros y no se están dando cuenta?
Ahora todos se arrogan la voluntad de los ciudadanos; nos han dado su voto para negociar, para llegar a acuerdos, para evitar una ruptura de España, incluso para mantener la monarquía de por vida, esto no deja de ser INCREÍBLE, un poder adivinatorio no puede ser tan perfecto, tan literal y por tanto cabe preguntarse, porqué entonces tenemos una izquierda inexistente y una fragmentación política tan escandalosamente enloquecida?.
Con todo esto es de suponer que el Rey Felipe VI esté un tanto nervioso y de hecho su discurso navideño dejó bien claro ése nerviosismo, tanto es así, que olvidó cosas tan fundamentales como la corrupción, los desahucios y los derechos sociales, todo en un marco Borbónico bien acomodado para transmitir una imagen de sencillez y austeridad, una imagen que fue directamente a los hemisferios de sus acólitos, pero fundamentalmente a los que pasaron la noche a la intemperie, una más. De su intervención sólo una pincelada: Anteponer España a intereses personales. Que cada uno piense lo que crea oportuno.
Y, como olvidar al Sr. Más y la CUP, que decidirá de forma sorprendente una votación secreta para el funeral político de este o su ensalzamiento, francamente, no puedo ser más escéptico después de los últimos retoques a esta Asamblea; 3.357 deben pronunciarse, a día de ayer sólo 2.261 eran los inscritos.
De momento, están pasando el abrillantador a los escaños de todos los Parlamentos, sólo queda esperan a las posaderas de sus Señorías. ¿ La conciencia estará tan impoluta coincidente con la voluntad de los ciudadanos?.
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