EL BAUTIZO DE ALICAI.
Mi musa con contrato laboral se ha quejado y con razón. No he consignado su nombre en el documento y podría transferir sus derechos a otra, por ello, he decidido asignarle uno que, contrariamente no será ni griego ni egipcio ni romano ni ateniense; se llamara ALICAI , un nombre que me gusta y que encierra todo un mundo, un maravilloso mundo gobernado por otras musas que siempre me acompañan. Así pues, mi musa literaria y de contrato laboral se llama ALICAI; ella vuelve a objetar, pero no hay nada más que decir al respecto.

Ahora tenemos la situación laboral debidamente corregida, no sin haberle manifestado mis quejas por el abandono de días pasados y concretamente el de ayer, cuando todo me invadía y mi pluma gritaba en el interior de mi chaqueta. No he recibido una contestación muy coherente a su ausencia, pero intuyo que tiene un lío por ahí y, no es que tenga nada en contra de ello, pero no debe olvidar lo fundamental; nada de ataduras que impidan y cercenen su libertad y nuestro compromiso. Todo es viable

Me gustaria saber que opinaría Méndez y Touso de este contrato; solo de pensarlo me troncho dela risa......

Ahora que todo circula en cierta armonía, voy a recuperar mis "notas sobre una partitura" y alguna otra cuestión que tengo olvidada, aparcada, fabricando polvo innecesario donde las telarañas están haciendo su habitat.

Hoy llueve, pero es un buen momento para mojarse y pisar charcos.....

Lon González