lunes, 3 de febrero de 2014

UN CÓNCLAVE CON AMOR



  Un fin de semana plagado de cuestiones para pasear el axón o neurita, ésas neuronas que nos hacen abrir los ojos y cerrarlos cuando muchas cuestiones nos perturban de tal modo qué mejor olvidarlas, pero que ocurre?

  Ocurre ni más ni menos, que los ciudadanos, por fin, usan sus neuronas para analizar y sobre todo, leer y releer todo, para no perderse, para estar en posición y tomar decisiones importantes..; lo vemos diariamente a través de sus manifestaciones, aunque por parte de las autoridades, se establezcan muros de distancia física para que los causantes de tanta insensatez no se vean "escrachados, ni olidos ni tocados y mucho menos, percibir la mirada directa de afectados". La sociedad está viva, viva y expectante; ya no sirve un discurso triunfalista y verborrea política para la galería, donde todo se confunde y donde todo se queda en las obviedades, aún así, se aplaude por sus seguidores sin llegar a cuestionar la ineficacia y el sentido común alejado de toda realidad.

  En el cónclave celebrado este fin de semana por el PP, hemos visto un tráfico de abrazos, sonrisas y amores confesos; el amor sobre todo ha surgido a través de cada palabra y ha sido tanta felicidad la traficada qué no ha quedado tiempo para llegar a los temas en profundidad, porque son conscientes de que en cada Real Decreto los ciudadanos son inyectados por medidas amorosas, llenas del calor que tanto se necesita, de ésa esperanza que se habría perdido en otra situación. Me he sentido realmente feliz y, si me quedaba alguna sobre sobre los temas vitales, han desaparecido y todo ello gracias a mi fe y a mi espíritu emprendedor; estoy a salvo de todo, como todos los ciudadanos.

 Solo una nota discordante, al final..; Rajoy, se enfadó con Rubalcaba y le puso donde él quería, no sólo eso, sino que le invitó a la reflexión por su mala conducta de oposición, por pretender enmendar las líneas de sus poemas amoros dirigidos a la ciudadanía, por tanto, un irresponsable...

Estoy convencido que Alfredo sabrá tomar nota de las recomendaciones del presidente.

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